martes, 25 de octubre de 2016

Propiedad intelectual y bibliotecas en sl siglo XXI

Ha llegado el momento de crear un marco mundial de 
derecho de autor para las bibliotecas y los archivos

Por Teresa Hackett,
Directora del Programa de Derecho de Autor y Bibliotecas, Electronic Information for Libraries (EIFL), Vilna, Lituania.
Las tecnologías digitales han transformado las bibliotecas, los archivos y el acceso a la información. Han revolucionado el panorama de la información.
Las bibliotecas y los archivos son fundamentales para la labor que desempeñan los científicos y los investigadores, una labor que cada vez es más colaborativa, interdisciplinaria e internacional. A la vez que crecen las oportunidades de búsqueda y descubrimiento de recursos gracias a las tecnologías digitales, crece también la demanda de acceso a materiales almacenados en bibliotecas y archivos de todo el mundo. Cada año las bibliotecas gastan miles de millones de dólares de los EE.UU. en contenido impreso y digital, y buena parte de ese dinero proviene de los contribuyentes. En 2014 se estima que este gasto alcanzó los 25.400 millones de dólares. Pero, frente a un laberinto de diferentes leyes de derecho de autor y condiciones para la concesión de licencias, las bibliotecas y los archivos se las ven y se las desean cada vez más para responder a las necesidades de información del público al que prestan sus servicios.

Conservar nuestro patrimonio documental, “nuestra memoria del mundo”, resulta costoso.  Con miras a reducir estos costos, poner coto a la duplicación de esfuerzos y optimizar la difusión, las bibliotecas y los archivos están explorando la posibilidad de emplear tecnologías digitales y crear infraestructuras de conservación que se puedan compartir a escala nacional e internacional.  Esto es imperativo en un mundo digital que no conoce fronteras.  Tal como afirmó Andrus Ansip, Vicepresidente de la Comisión Europea responsable del Mercado Único Digital, “el carácter sin fronteras de las tecnologías digitales hace que ya no tenga sentido que cada país de la Unión Europea tenga una normativa diferente para los servicios de telecomunicaciones, derecho de autor, protección de datos o gestión del espectro radioeléctrico”. [...]

Así comienza el artículo de Teresa Hackett en OMPI Revista , la revista de la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual. (OMPI/WIPO) la cual es "el foro mundial en lo que atañe a servicios, políticas, información y cooperación en material de propiedad intelectual (PI)" según se define en su página web.

Si bien el artículo no habla exactamente de acceso abierto sí nos plantea la necesidad de una nueva mirada sobre la propiedad intelectual a partir de las nuevas tecnologías de almacenamiento y distribución de la información, especialmente con respecto al tema de las bibliotecas.

El texto completo puede leerse en OMPI Revista (n°6, dic. 2015).





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